Ir directamente al contenido

Propuesta de reflexión previa a la Asamblea General Anual

Tipo
ALDEE. Socios
Fecha
16 Diciembre 2024

En los últimos meses hemos recibido varias consultas relacionadas con la gestión de las ofertas de trabajo que llegan a nuestra asociación para ser difundidas entre nuestros socios/as. Este asunto, recurrente pero lleno de matices y desafíos, nos lleva a plantearnos cuestiones fundamentales:

  • ¿Debemos evaluar las ofertas laborales que recibimos antes de difundirlas?
  • ¿Es nuestro papel descartar aquellas que consideremos problemáticas o, por el contrario, facilitar que los/as profesionales decidan según sus propias circunstancias?
  • ¿Cómo podemos equilibrar la defensa de nuestra profesión con el respeto por la autonomía individual?

Estas preguntas no tienen respuestas sencillas, y por ello queremos abrir un periodo de reflexión previo a la Asamblea General Anual, donde se decidirá qué postura adoptaremos como colectivo ante estas situaciones.

A continuación, compartimos un texto titulado "Una militancia agotadora", que busca servir como punto de partida para el debate. Este escrito recoge los desafíos, dilemas y posibles propuestas que podríamos considerar en torno a la gestión de ofertas laborales. Os animamos a leerlo, reflexionar y compartir vuestras opiniones para enriquecer el debate.

El objetivo es que, en la Asamblea General, podamos votar una postura consensuada que refleje los valores y las prioridades de nuestra asociación.


Una militancia agotadora: entre la defensa colectiva y la autonomía individual

En nuestro colectivo de archiveros, bibliotecarios y documentalistas, la defensa de valores éticos y condiciones laborales justas es uno de los pilares fundamentales. Sin embargo, el manejo de ofertas laborales que carecen de transparencia o parecen no cumplir con estándares dignos plantea un desafío que va más allá de las buenas intenciones.

Recientemente, hemos debatido cómo actuar frente a una oferta laboral que no incluía detalles esenciales como la categoría profesional o el tipo de puesto. Este caso, aparentemente anecdótico, ha vuelto a poner sobre la mesa un dilema recurrente: ¿debemos actuar como garantes de la calidad de las ofertas que promovemos, o es mejor dejar que cada profesional decida por sí mismo?

La complejidad de evaluar ofertas laborales

Decidir si publicamos o no una oferta no es un acto neutral. Implica un ejercicio de evaluación que, a menudo, está fuera de nuestro alcance como colectivo. Esta tarea conlleva varias problemáticas:

  1. Falta de tiempo: los miembros de la junta dedicamos nuestro tiempo a estas cuestiones de manera voluntaria, y evaluar cada oferta con detalle demanda un esfuerzo que no siempre podemos asumir.
  2. Ausencia de formación en derecho laboral: aunque actuamos con la mejor voluntad, no somos expertos legales, lo que nos sitúa en una posición delicada al interpretar convenios, categorías y funciones laborales.
  3. Confusión de roles: al analizar y tomar decisiones sobre ofertas, corremos el riesgo de asumir un papel más propio de un sindicato, algo que no somos ni pretendemos ser.
  4. Tensiones internas: estas decisiones generan debates internos en la junta, ya que nuestras perspectivas sobre hasta dónde debemos intervenir pueden diferir. Este choque de posturas es enriquecedor, pero también desgastante, especialmente cuando se suma a la carga de trabajo que ya enfrentamos.

El riesgo de decidir por otros

Un aspecto especialmente delicado es cómo nuestras decisiones pueden ser percibidas por los profesionales a quienes representamos. Decidir no publicar una oferta porque no la consideramos digna puede tener un impacto negativo en aquellas personas que, estando en situación de desempleo, podrían valorarla como una oportunidad válida.

Es fundamental recordar que, aunque como colectivo podemos señalar las ofertas que consideramos problemáticas, la decisión final debe corresponder siempre a los profesionales que buscan empleo. Nuestra labor no puede sustituir su capacidad de evaluar, ponderar y decidir si una oferta, pese a sus limitaciones, se ajusta a sus necesidades o expectativas.

Un enfoque en positivo: resaltar lo bueno, no excluir lo imperfecto

En lugar de centrarnos únicamente en descartar ofertas que consideramos problemáticas, podríamos trabajar como colectivo en desarrollar un enfoque que valore y promueva las buenas prácticas laborales en el sector. Estas cuestiones son delicadas y merecen una reflexión profunda, así como un posicionamiento claro frente a las empresas del ámbito.

Algunas propuestas a adoptar serían:

  1. Etiquetas de recomendación: explorar la posibilidad de crear un sistema para destacar aquellas ofertas que cumplan con criterios éticos mínimos, como transparencia, salario acorde al convenio y funciones bien definidas. Estas ofertas podrían identificarse como "éticamente responsables".
  2. Guías para contratantes: diseñar y difundir un documento que defina qué estándares esperamos de las ofertas laborales en el sector. Este posicionamiento no solo fomentaría las buenas prácticas, sino que también reforzaría nuestra autoridad como colectivo profesional.
  3. Reflexión interna: plantear este tema en una asamblea o reunión estratégica donde se aborden las implicaciones de adoptar un enfoque activo en la promoción de ofertas responsables. Este ejercicio permitiría alinear nuestras acciones con los valores del colectivo.

Estas acciones, todavía una hipótesis de trabajo en función de lo que decidan los socios en asamblea, podrían irse en herramientas valiosas para mejorar las condiciones laborales y construir un diálogo constructivo con las empresas.

El rol del colectivo: facilitador, no juez

Nuestra función principal debe ser la de facilitar herramientas y promover estándares éticos, entendiendo que la defensa de la profesión también incluye un posicionamiento claro contra la desvalorización de nuestro trabajo. Permitir que se difundan ofertas que infravaloran nuestras competencias o ignoran los convenios colectivos no solo afecta a quienes buscan empleo, sino que también debilita nuestra imagen profesional y contribuye a perpetuar dinámicas laborales que desprecian la importancia de nuestra labor.

Al mismo tiempo, debemos tener presente que no nos corresponde juzgar qué oportunidades son válidas para cada profesional. Como colectivo, nuestro papel no es decidir por otros, sino garantizar que tengan toda la información y las herramientas necesarias para tomar decisiones informadas, respetando siempre la diversidad de circunstancias y perspectivas.

Reflexión final: una militancia responsable y sostenible

Gestionar las ofertas laborales es un ejercicio delicado que pone a prueba nuestras capacidades y nuestra cohesión como colectivo. A menudo, exige más tiempo del que disponemos, nos confronta con nuestras limitaciones formativas y nos lleva a asumir un rol que no es el nuestro. A esto se suman las tensiones internas en la junta, donde las perspectivas pueden ser tan diversas como legítimas.

Ante este escenario, es fundamental recordar que nuestro compromiso ético no debe estar reñido con la sostenibilidad de nuestras acciones ni con el respeto por la autonomía individual. Ser "agitadores" no significa imponer decisiones, sino fomentar el debate, construir puentes y promover un cambio positivo.

Por ello, invitamos a todos los miembros a reflexionar sobre este tema en nuestra próxima asamblea. El desafío no es menor, pero juntos podemos encontrar un modelo que combine nuestra militancia ética con la realidad diversa de los profesionales a quienes representamos.

Por un colectivo que inspire, facilite, combata la desvalorización de nuestra profesión y respete siempre la libertad de decisión de quienes buscan empleo.

Gracias por vuestra implicación.

Junta Directiva de ALDEE

 

¿Quieres ser socio? Tiene grandes ventajas

Date de alta

  • Defiende tus intereses
  • Participa en las actividades
  • Descuentos en la inscripción a cursos
  • Recibe ofertas de empleo
  • Participa en los grupos de trabajo
  • Información profesional actualizada

Customización de cookies

Cookies Analytics

Este sitio web utiliza cookies de terceros para cuantificar el número de usuarios y así realizar la medición y análisis estadístico de la utilización que hacen los usuarios del servicio ofertado. Para ello se analiza su navegación en nuestra página web con el fin de mejorar la oferta de productos o servicios que le ofrecemos por medio de la cookie Google Anlytics

Cookies para compartir en redes sociales

Usamos algunos complementos para compartir en redes sociales, para permitirle compartir ciertas páginas de nuestro sitio web en las redes sociales. Estos complementos colocan cookies para que pueda ver correctamente cuántas veces se ha compartido una página.